Ir al contenido principal

Sigo aprendiendo de ti.

Después de los periodos de tiempo que pasamos sin hablarnos,
sin tener contacto, sin saber cada uno del otro, 
me pregunto si piensas en ti como yo lo hago.
Si cada fin de semana en la madrugada, piensas en llamarme, 
cómo yo pienso que cuando mi celular suena, quizá eres tu, de nuevo, borracho.
Pienso en ti, claro que lo hago, pero estoy contenta de decir, que ya no siempre.
Después de cerrar el ciclo, he aprendido a llevar la vida sin ti y contigo a la vez.
Sin ti, presencialmente, contigo, siempre en mi mente.
Me fue difícil dejarte ir, o quizá darme cuenta que ya nunca estabas, 
que en realidad no te deje ir, ¡Ya te habías ido!
Esta es mi parte favorita de la vida: aunque tu no quieras, aunque creas
no poder soportarlo, TODO PASA, la vida se va a ir contigo o sin ti, 
por lo que es obligatorio seguir.
Es curioso como después de que tomaste ya la decisión, viene la precisión,
todo deja de ser turbio para mostrarse transparente.
Deje de ver las cosas como si el problema fuera tuyo,
empecé a asumir la responsabilidad que siempre fue mía.
Deje de decirme: ¡Qué obsesión la tuya de hacerme tanto daño! 
Para aceptar ¡Que afán el mio de permitirlo!
No entiendo nunca, como el amor puede doler tanto,
Como a veces nos empeñamos en convertir el amor en molestia.
Porque arruinamos un lindo recuerdo, para convertirlo en uno que hostiga.
Tampoco entiendo porque deje de creer en el amor, maximizando mi desconfianza en ti.
Me dolía no tenerte en mi vida, pero me dolía aún más cuando estabas en ella.
Me dí cuenta, tarde pero lo hice, que la vida era mejor sin ti, y que como dice esa
canción: 'Él es el que perdió'
Ya no quiero estar contigo, ni ahora ni nunca,
aunque sabes que a cada momento lo esté, en la mente y la mitad de mi alma esté en ti.
Odio hablar de ti, pero no dejo de aprender nunca de todo lo que me has dejado.

Quizá no era el tiempo de estar juntos.
Quizá no era el lugar para estarlo,

O quizá, ME EQUIVOQUÉ DE PERSONA.

Yo siempre enigmada con la vida:
Ella

Comentarios

Entradas populares de este blog

Veo humanos, pero no humanidad.

¿Te has fijado como somos de indiferentes las personas? Como no reaccionamos, no nos importa, la indiferencia es peor que las otras actitudes. ¿Ves como somos soldaditos?  Hechos para obedecer y no preguntar. Parece que la sociedad esta dejando de evolucionar, no mejoramos, estamos destruyéndonos, parece que avanzamos, pero PARA ATRÁS. He querido cambiar las cosas, una, diez cien veces. Me siento tan enojada, no puedo ser la única con ganas de cambiar. Claro siempre te dicen que empieces por ti misma, ¿Y sabes por qué te lo dicen? Sí, porque es lo más difícil. Pero después de haberlo intentado y de haber fracasado tanto, me he sentido tan vacía, tan ridícula, tan frustrada. Y luego tan yo, como siempre; tan yo. Y no sé que es, siento que estoy equivocada, espero que alguien conteste a tantas interrogativas que de todo surgen. Pero, ¿sabes qué? Nunca nadie lo hace y eso me lastima tanto, ¿Por qué se aferran en hacerme sentir tan mal? ¿Por qué siempre quieren hacerte ve...

Es fin de año y no pude evitar escribirte.

Papá, estoy en Montevideo. Qué lugar lindo, debo decir, acabo de dar una vuelta y mire una casa como aquella que te gusta que está en Bosques, que cuando íbamos a misa y pasábamos te decía: yo te la voy a comprar. He pasado por Santiago, por Buenos Aires y ahora estoy hirviendo aquí en frente al mar. Quise empezar esto así, pero sabes que estoy llena de nostalgia, naturalmente porque nací contrariada con la vida y aumentado por estas fechas que se recuerda mucho a la familia y que lejos uno se da cuenta que hasta lo más mínimo es lo más maravilloso. Estoy haciendo un recuento de los daños, bueno quiero decir de este año y de doce meses he pasado cerca de siete fuera, y yo sé que esto debo de aprovecharlo, que hay pocas oportunidades así pero soy débil y todo me recuerda a casa, a la abuela, a la ciudad, a Ringo (nuestro perro). Vos sabes cuánto vivo atada a la nostalgia. Y es cierto también, que es bueno viajar, mira de cuantas cosas me he dado cuenta, cuanta pertenencia tengo haci...

Tara, ¿mi gata?

¿Qué sabemos del vacío en realidad? A veces (seguido), me parece irónico que siendo lo que es esa palabra, sea una sensación tan exhaustiva, decir que está vacío es como decir que no hay nada, pero al mismo tiempo, ese vacío lo ocupa todo. Decir que no hay nada no es tan cierto, pero es una manera de relegar todo, de tirarlo a un segundo plano. Y decir que Tara ocasionó el vacío más profundo en mi vida, no es para nada una exageración. Ahora no hay nada y al mismo tiempo un pensamiento sostenido que gira a su alrededor. Se fue Tara, salió de casa, se perdió. Siempre digo ¡Tara es mi gata! (o, ¿era?), pero Tara nunca fue mía, Tara sólo me escogía para brindarme su compañía. Tara era de ella y de la naturaleza que la hizo increíblemente perfecta. Tara es el nombre que le puse y me parecía profundamente impecable para esos ojitos que se expandían cuando ella me miraba, cuando jugábamos y seguía sigilosamente mis dedos en la orilla de mi cama. Tara no era mía, pero como humana, me gustaba ...