Es como estar cayendo en el abismo, como si de repente, todo se acabara. Más bien así es. Un día se acabó y no hubo para más. No pude decirte nada, me mordí el corazón y el orgullo para no coger tu mano, para ahogar mis ganas de besarte y de convencerte. Es curioso, pero a pesar del transcurso del tiempo, en vez de que dejara de desearte ¡TE DESEABA MÁS! Quería más estar contigo, me gustaba más quien eras y todo lo que habías sido. No decía, ya me cansé o estoy aburrida, porque no era así.
No sé cómo pueden terminar las cosas, pero lo hacen. Un día me llamaste decidido y me dijiste: listo, gracias.Y yo impactada hay días en que no me la creo.
Me deshago y quisiera no pasar por este dolor. Curiosamente quisiera que me aliviaras, cuando tú eres quien me tiene así.
No sé cómo sigo existiendo, contrario a lo que comúnmente se pudiera pensar, cada día es mucho más complicado. Hace unos días nos amábamos –y en ese tiempo verbal porque todavía no termina- y me pregunto si será que el amor no alcanza, si a veces no es suficiente querer con todo el corazón y termino por suponer que no.
No sé cómo pueden terminar las cosas, pero lo hacen. Un día me llamaste decidido y me dijiste: listo, gracias.Y yo impactada hay días en que no me la creo.
Me deshago y quisiera no pasar por este dolor. Curiosamente quisiera que me aliviaras, cuando tú eres quien me tiene así.
No sé cómo sigo existiendo, contrario a lo que comúnmente se pudiera pensar, cada día es mucho más complicado. Hace unos días nos amábamos –y en ese tiempo verbal porque todavía no termina- y me pregunto si será que el amor no alcanza, si a veces no es suficiente querer con todo el corazón y termino por suponer que no.
Estoy en mi etapa de negación, quizá por eso me he abstenido de escribir. A veces me llegan aires de pensamientos y quiero escribirte comenzando por decir: te he admirado, siempre lo he hecho, eres tan valiente y TAN INTELIGENTE EMOCIONALMENTE. Desde que comenzamos nuestra historia, la primera vez que te dije que ya no quería salir contigo, me di cuenta de lo resistible que eras y después, nunca tuve miedo de romperte el corazón ¡PORQUE EL TUYO NO SE ROMPE! Más bien tenía miedo de romper el mío en el camino. Soy tan apegada a todo, me duele cada singular pérdida y ¿sabes? No es algo que ame, no puedo desprenderme de nada que haya querido y yo ¡Cuánto te quiero! No me gusta decirlo en presente, pero, uno no deja de querer de un día a otro ¿o sí? Ni siquiera pasados los meses e incluso los años. El amor se transforma, pero no se acaba y de eso, no tengo dudas.
Ahora me ofusca el dolor, amanezco perdida, deseando despertar de esta pesadilla tan real. Quizá me duele mucho más por lo bueno que fue todo. Digo, yo no puedo pensar que haya terminado algo terrible, mucho por el contrario, terminó lo más hermoso que he vivido y tengo que decir que no sólo terminó eso, sino que también terminó conmigo. Quiero decir, nunca creí que fuera posible experimentar tanto dolor (y tampoco tanto amor como el que te tuve, -yo te veía y me preguntaba ¿será esto posible?-) quizá es que, en la medida en que te quise, esto me lastima, pero no es así. No creo que después de cuatro años yo esté despertando del mejor sueño de mi vida. Sé que suena tan deprimente y dependiente, pero, no me imagino la vida sin ti (a pesar que la estoy viviendo), inclusive sé que no habrá nadie que llene tu lugar porque no me lo voy a permitir. No estoy dispuesta a dejar que, este espacio que has dejado, mismo que tu hiciste en mí, sea ocupado por alguien más. Te hice un espacio tan grande, que el vacío ahora es inmenso. Quiero explicarme, yo esperaba tanto de ti –todo, menos esto, claro está, aunque también te lo agradezco– que espero que todo lo que hayamos vivido sea único ¿De qué serviría pasar de un amor a otro sintiendo lo mismo? Las personas son únicas y espero que los amores también lo sean.
Muchas veces te dije que eras el amor de mi vida, y claro que lo fuiste. Fuiste el amor de mi vida durante el tiempo que la compartí contigo. Pienso también, que Dios me dio mucho más de lo que merecía (y quizá se dio cuenta), me permitió vivir los sentimientos más intensos que jamás he experimentado y espero que sea la única y la última vez.
Muchas veces te dije que eras el amor de mi vida, y claro que lo fuiste. Fuiste el amor de mi vida durante el tiempo que la compartí contigo. Pienso también, que Dios me dio mucho más de lo que merecía (y quizá se dio cuenta), me permitió vivir los sentimientos más intensos que jamás he experimentado y espero que sea la única y la última vez.
Ahora, ahora me asfixia el dolor, pero me acuerdo cuando también me asfixiaba el amor y la sensación de estar contigo ¡Qué increíble fue! Yo pensaba ¿Cuánto tiempo me he perdido de esto? Amarte se convirtió en una experiencia inagotable de crecimiento personal, era más que mi actividad favorita, amarte me demostró a mí misma que el ser humano cuando se comparte emocional y físicamente con otra persona puede llegar a la plenitud.
Estoy consciente que no tengo nada que reclamarte y por el contrario, tengo MUCHO QUE AGRADECERTE. No por quedarte tanto tiempo, porque yo nunca te lo pedí, sino por la decisión que hubo en ti de compartirte conmigo y de compartirme tu mayor tesoro: tu familia. Eres una persona excepcional, no tarde en darme cuenta y por ello nunca quise soltarte, te amo demasiado Fer, te admiro porque eres el ejemplo de que los hombres NO SON IGUALES. Yo sé que te hice mucho a mi medida, te dije que no me gustaban las rosas –y nunca me compraste, ni siquiera cuando era caprichosa (gracias); desde el primer día te dije que no me abrieras la puerta, porque yo podía, y muchas cosas más. Claro que me duele haber hecho tantas memorias o quizá, no es eso lo que me duele, sino que ya no pueda hacer más contigo. De una manera u otra, tantos recuerdos me demuestran que fue real. Gracias (también) por aguantarme, sé que soy una persona complicada y difícil, no pude pedirte que me entendieras porqué ¡NI YO ME ENTIENDO! ¿Cómo podría pedirte que tú lo hicieras?
Pero te doy las gracias porque a pesar de ello, estuviste ahí para acariciar mi pelo, y no sabías, pero también me acariciabas el corazón con tus dedos. Gracias por impulsarme cuando no pude hacerlo y por empujarme a confiar en mí, todo lo hacías parecer tan fácil que decía: seguro yo también puedo. Ahora me siento desprotegida, débil, desconsolada, me aturde el vacío que ha dejado tu ausencia y me pregunto: ¿Qué estará sintiendo? Yo sé que poco más que nada, porque como me dijiste: La vida sigue ¿no? Y quizá, eso me hunde más, porque me pregunto si todo habrá sido real y hasta parece QUE NO TE CONOZCO o peor aún, que nunca te conocí. Parece que eres otra persona, porque cuando te llamo, no parece estar a quien estoy buscando a pesar de que, aparentemente estoy hablando con ella. Tanto tiempo y esto ¿se termina así? ¿Sin una explicación? Y sí, quizá tienes razón, ¿por qué habría de haberla? Me hubiera gustado decirte: No te rindas, por favor no cedas (Así como escribió Mario Benedetti), pero quizá ya era difícil para vos, y quisiera decir que lo entiendo, pero la verdad es que no. Solo espero curarme y que este infierno que parece no acabar, acabe.
Pero te doy las gracias porque a pesar de ello, estuviste ahí para acariciar mi pelo, y no sabías, pero también me acariciabas el corazón con tus dedos. Gracias por impulsarme cuando no pude hacerlo y por empujarme a confiar en mí, todo lo hacías parecer tan fácil que decía: seguro yo también puedo. Ahora me siento desprotegida, débil, desconsolada, me aturde el vacío que ha dejado tu ausencia y me pregunto: ¿Qué estará sintiendo? Yo sé que poco más que nada, porque como me dijiste: La vida sigue ¿no? Y quizá, eso me hunde más, porque me pregunto si todo habrá sido real y hasta parece QUE NO TE CONOZCO o peor aún, que nunca te conocí. Parece que eres otra persona, porque cuando te llamo, no parece estar a quien estoy buscando a pesar de que, aparentemente estoy hablando con ella. Tanto tiempo y esto ¿se termina así? ¿Sin una explicación? Y sí, quizá tienes razón, ¿por qué habría de haberla? Me hubiera gustado decirte: No te rindas, por favor no cedas (Así como escribió Mario Benedetti), pero quizá ya era difícil para vos, y quisiera decir que lo entiendo, pero la verdad es que no. Solo espero curarme y que este infierno que parece no acabar, acabe.
Más que tu ausencia, me duelen los sueños y planes que construimos juntos, me duele que haya muerto el lugar más seguro que tenía: nuestra relación. Quizá sea eso lo que más me lastima. Es más que dejar de sostener tu mano, es el paso de una plaga que se comió mi casa.
Es cobarde decir que de haber sabido que me dolería o que algún día terminaría, nunca me hubiera arriesgado, porque no es así. Todo tiene un precio, y este es el valor de todo lo vivido, nadie me dijo que sería tan caro pagarlo, pero bien sabía que todo lo que comienza, también acaba. Aun así, estar contigo fue más ganar que perder.
Gracias por todo Fer, por los sueños, por los planes (incluso los que no cumplimos), por las convicciones y por el tiempo compartido. Siempre he pensado que lo más valioso que puedes darle a una persona es el tiempo, porque no se recupera. No hay reclamos ni reproches PORQUE ASÍ NO ES EL AMOR, hay nostalgia por las flores increíbles que sembraste y que no puedes regar más.
Te amo y sí, como tu dices seguro va a pasar y un día todo mejorará.
YO SIEMPRE ENIGMADA CON LA VIDA.
ELLA.
YO SIEMPRE ENIGMADA CON LA VIDA.
ELLA.
Prometo que será mi último comentario, no quiero hostigar, ¡Promesa!
ResponderEliminarMe recordaste la conversación del principito y el zorro... dejaste que Fernando "creará lazos" contigo, un vínculo, ya no era sólo una persona más...
Creo que eres algo dura contigo y es fácil escribirlo pero en efecto, hay que mirar al frente y dejar atrás las penas y todo lo que nos aferre al pasado.
Bueno, sólo es un simple comentario y fue bueno leerte y saber que hay alguien que escribe con verdadera pasión en algún lugar.
Hola Edgar! no tiene porque ser tu último comentario, te agradezco que comentes mis entradas y que te des el tiempo de escribirme!
ResponderEliminarEs difícil aprender a soltar pero lo estoy intentando!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarTe recomiendo leer el libro "Los Cuatro Acuerdos, un libro de Sabiduría Tolteca" Dr. Miguel Ruíz. Estoy casi seguro que te ayudará en general.
EliminarLo importante de cuando una relación que creíamos iba a tener un final feliz (como los cuentos que solíamos escuchar de nuestros padres), finiquita de una forma que nunca contemplamos o que nos daba de cierta forma "TEMOR" que pasara, es muy importante elucubrar cada uno de los factores que nos posicionaron en tales coordenadas; pero, lo más importante si llegamos a la conclusión de que tales factores fueron a causa nuestra, de antemano aprender de los "errores", pero sobre todo no culparnos con exceso, el sentimiento de culpa no puede trascender más de lo necesario porque es cuando nos sojuzgamos. Si el resultado se suscitó por la otra parte, tampoco es bueno sentirnos mal porque simplemente y como típico cliché "no era para nosotros", de cierta forma son situaciones indefectibles que por más que remamos en contracorriente tienen que ocurrir.
No pretendo tener la razón, pero sí que no te sientas mal por una situación que ya no estaba en tus manos remediar, por lo que puedo notar en verdad que lo quieres mucho, y si no están juntos no es porque tú así lo prefieras, puede ser que tampoco porque él así lo haya querido, sino que era algo que tenía que pasar.
Hay muchas cosas que no percibimos y disfrutamos por tener nuestra mente en el pasado, nos aferramos a querer vivir lo ya vivido y no disfrutamos del viaje que seguimos experimentando, es cuando debes pensar en cuantas personas que ya conoces quisieran poder pasar una tarde contigo, hablo de amigos, familiares y todo aquel que sueña ahora en poder compartir su tiempo contigo.
También te recomiendo no hacerme mucho caso, me he autodiagnosticado con la enfermedad del gran señor don Quijote, pero en mi caso no es por el mucho leer jejeje...
Saludos y vas a ver que en un tiempo vas a superar aquello que te aturde y te quita el sueño, y no puedo omitir que es un placer leerte.